Dulce casero de membrillo y manzana reineta

El dulce de membrillo es todo un clásico y si es casero mejor aún, se puede realizar sólo con membrillo o combinándolo con manzanas, una combinación deliciosa para aprovechar la fruta de temporada.
Además al buscar la textura para poder cortarlo (como los que encontramos en los supermercados) quedan ideales en los moldes de bombones de Silikomart, tamaño ideal para preparar brochetas con queso, en casa nos encanta con cheddar, y os aseguro que quedan ideales para cualquier reunión o fiesta que tengáis en casa o a la que estéis invitados.
Lo mejor del dulce de membrillo y manzana es que podéis preparar cantidad y al ser una conserva tenerlo guardado para toda la temporada.

INGREDIENTES:

800 gr membrillos lavados y descorazonados (con piel)
200 gr manzana reineta lavada y descorazonada (con piel)
800 gr azúcar
Zumo 1 limón

ELABORACIÓN:

Lavamos bien los membrillos, quitándoles toda la pelusa que los recubren, cortamos en trozos descartando zonas feas y las pepitas. Troceamos y disponemos en una olla amplia. Seguidamente realizamos el mismo proceso con las manzanas reinetas.
Cubrimos con el azúcar y dejamos reposar en la nevera al menos 8 horas (es el mismo proceso que las mermeladas).
Pasadas las 8 horas la fruta habrá soltado el jugo y el azúcar se habrá deshecho en parte, rociamos con el zumo del limón y llevamos al fuego.
Una vez la mezcla comience a hervir bajamos el fuego a potencia media, la fruta comenzará a convertirse en compota y a estar blanda, una vez conseguido este punto trituramos la mezcla y seguimos cocinando a fuego suave-medio.
Veréis que la mezcla comenzará a espesarse, tengan cuidado porque salpica y os podéis quemar.
El dulce estará listo cuando con la cuchara que estemos removiendo se quede de pie.
Una vez hemos conseguido la textura adecuada vertemos la mezcla en los moldes elegidos, filmamos por contacto y dejamos enfriar totalmente antes de desmoldar. Si viérais que al desmoldar no habéis conseguido la textura deseada podéis volver a cocinarlo unos minutos más.
Os recomiendo moldes de silicona y además podéis aprovechar los de bombones de Silikomart, en nuestro caso fueron los de ángeles, y así hacer brochetas con queso, ideales para el picoteo de cualquier fiesta que tengáis.